Fabula el lobo y el cordero

Érase una vez un lobo que vio un cordero pastando en un prado. El lobo pensó que sería fácil atrapar al cordero y se acercó a él con intención de atacarlo. El cordero, al ver al lobo, empezó a temblar de miedo. El lobo le dijo: "¿Por qué temes? Yo no te haré ningún daño". El cordero respondió: "Sé que eres un lobo y que vas a atacarme". El lobo trató de convencer al cordero de que no le haría ningún daño, pero el cordero no le creyó. El lobo, enfadado, acabó atacando y devorando al cordero.

Esta fábula enseña que no debemos confiar en los que nos quieren hacer daño.

Qué se cuenta en la fábula el lobo y el cordero

El lobo y el cordero se levantaron temprano una mañana de verano para buscar comida. El lobo encontró una vaca muerta en el campo y se acercó para comer. El cordero vio al lobo y le preguntó si podía tener un poco de carne también. El lobo dijo que sí, pero en realidad quería comer al cordero. El cordero no se dio cuenta y siguió acercándose. El lobo atacó y devoró al cordero.

Qué enseñanza nos deja la fábula el lobo y el cordero

La fábula del lobo y el cordero nos enseña que la injusticia siempre se pagará.

El lobo estaba hambriento y buscaba una excusa para atacar al cordero. El cordero le preguntó al lobo por qué quería atacarlo, y el lobo respondió que era porque el cordero le había ofendido. El cordero se defendió diciendo que no podía haberlo hecho, ya que era mucho más pequeño que el lobo.

El lobo no le hizo caso al cordero y lo atacó de todas formas. El cordero fue devorado por el lobo, pero antes de morir, el cordero le dijo al lobo que la injusticia siempre se pagará.

Este cuento nos enseña que no podemos cometer injusticias, ya que siempre tendremos que pagar por ellas.

Qué criterio ético utiliza el lobo en su actitud con el cordero

El lobo tiene un criterio muy estricto cuando se trata de la actitud hacia el cordero. No tolera ninguna forma de abuso o maltrato, y cualquier cordero que trate de hacerle daño será castigado severamente. Si un cordero es agresivo o intenta atacar al lobo, este reaccionará de inmediato y lo atacará sin piedad.

La fábula del lobo y el cordero nos enseña que a veces las apariencias engañan. El lobo, que parecía ser una amenaza, resultó ser una figura amable y protectora. El cordero, por otro lado, que parecía ser una presa fácil, resultó ser más fuerte y valiente de lo que esperaba. Esta fábula nos enseña a no juzgar a las personas por su apariencia.